La mamoplastia de reducción extirpa parte del tejido y de la piel de los senos para darles nueva forma y reducir su tamaño. La meta de la cirugía es aliviar el dolor o resolver algunos problemas ocasionados por tener los pechos demasiado grandes. Si estás pensando en realizarte este tipo de cirugía, aquí te decimos todo lo que necesitas saber.
Antes del procedimiento
Tomate el tiempo suficiente para reunirte con tu cirujano para hablar sobre el plan para la cirugía, no olvides que esta es tu oportunidad para hacer todas las preguntas que tengas. Primero se te hará un examen físico y se te preguntará sobre tus antecedentes médicos. El examen puede abarcar análisis de sangre y otras pruebas que sean necesarias. Si eres mayor de 40 años deberás hacerte una mamografía si no te has hecho ninguna el último año.
Debes informar a tu cirujano si:
- Estás embarazada, piensas que podrías estar embarazada o estás amamantando.
- Tu o una pariente cercana han tenido cáncer de mama o cualquier otra afección que afecte las mamas.
- Te has hecho antes alguna cirugía de mamas.
- Tienes algún problema de salud general.
- Has presentado alguna reacción alérgica o algún otro tipo de reacción negativa a la anestesia, el látex o algún medicamento.
- Qué medicamentos estás tomando en el momento de la consulta, así como vitaminas, suplementos herbales, si fumas, bebes alcohol o usas drogas.
Durante el procedimiento
La técnica específica para reducir el tamaño de los senos puede variar, puede ser una cirugía mediante incisiones o una liposucción para remover la grasa en exceso acumulada en los senos. Por lo general, el cirujano realiza una incisión alrededor de la areola y debajo de cada seno. Luego retira el exceso de tejido, grasa y piel del seno para reducir su tamaño. Por último, remodela el seno y reposiciona el pezón y la areola. Por lo general la operación suele durar de 2 a 5 horas y se realiza con anestesia general.
Después del procedimiento
Inmediatamente después de la cirugía: las mamas se protegerán con un vendaje. Se colocará una sonda debajo de cada brazo para drenar el exceso de sangre o fluido. Es posible que el cirujano te recete analgésicos para el dolor y antibióticos para disminuir el riesgo de infección. Durante los primeros días después de la cirugía: las mamas se sentirán sensibles, inflamadas y presentar hematomas. Deberás utilizar un sostén de compresión elástica para protegerlas y tener una visita de seguimiento con tu cirujano para retirar los puntos y controlar tu recuperación.
Si estás considerando la cirugía de reducción de mamas, no dudes en consultar con un cirujano plástico certificado. Ya que siempre es importante comprender por completo qué implica la cirugía de reducción de mamas, así como los posibles riesgos y complicaciones.
El doctor Milton Solís es médico y cirujano egresado de la Universidad San Carlos de Guatemala y cirujano plástico egresado de la Universidad de Guadalajara, México. También es miembro de la Federación Ibero latinoamericana de Cirugía Plástica y Asociación Internacional de Cirugía Plástica. Ofrece distintos servicios de cirugía plástica y reconstructiva como: cirugía facial, rejuvenecimiento, cirugía nasal, cirugía de busto: aumento con implante, reducción, reconstrucción post-cáncer, cirugía de abdomen: abdominoplastia, liposucción, lipoinyección, inyección de Botox, relleno de arrugas y cirugía de implante de pantorrillas.